Bombón de mani
INGREDIENTES
- 300 gr de pasta de mani
- 100 gr de chocolate blanco fundido
- 100 gr de azúcar impalpable
¿SABÍAS ESTO?

Existen diferentes historias que tratan de esclarecer los orígenes del bombón, ese pequeño y apreciado dulce que tanto gusta. Y es que, a pesar de su reducido tamaño, tras la invención del bombón se esconde una gran historia.
Seguramente la más afamada y extendida sea la historia que data del siglo XVIII. Según la misma, el pastelero del monarca francés Luis XIV (el también conocido como Rey Sol), le presentó unas pequeñas frutas bañadas en chocolate. Tras probarlas, Luis XIV respondió con un bon bon, indicando de este modo su aprobación. De bon bon (en francés, bueno bueno) surgió el término bombón, que es el nombre que a día de hoy reciben estas pequeñas delicias de chocolate.

Desde que el Rey Sol bautizara de forma accidental a cualquier tipo de chocolate relleno con el nombre de bombón, éste ha ido ganando en popularidad. Sin embargo, no fue hasta principios del siglo XX cuando se empezaron a popularizar gracias a la aparición del producto en el mercado estadounidense.
Años después, artesanos belgas, suizos, italianos y franceses perfeccionaron la técnica de elaboración del bombón a través de técnicas manuales. De este modo surgieron gran cantidad de negocios familiares en los que se guardaban con gran recelo las recetas para la fabricación de las coberturas y de los exquisitos rellenos.
PREPARACIÓN PASO A PASO
En un bol mezclar 300 gr de pasta de maní con 100 gr de chocolate blanco fundido y 100 gr de azúcar impalpable. Unir con las manos hasta lograr una textura firme y que no se pegue (es posible que sea necesaria más cantidad de azúcar, o incluso, menos). Hacer bolitas, bañarlas en chocolate con leche e inmediatamente, rebozarlas por los vasitos de helado triturado y llevar al frío. Bañarlas nuevamente por chocolate, dejar secar y envolver a gusto.